Fotografías: Archivo histórico de la UAM.
“En 1974, el nacimiento de la UAM como institución libre y flexible fue resultado de la concepción de destacadas y destacados integrantes de las comunidades científica, humanista y cultural, dando sustento a una institución pública, federal y autónoma comprometida con la sociedad. Dicho proyecto nacería con un modelo innovador entre la docencia, la investigación y la difusión de la cultura. Su ubicación geográfica se determinó estratégicamente en lo que en aquellos años eran las periferias, pero en la frontera del conocimiento”, destacó el doctor José Antonio de los Reyes Heredia, rector general de la UAM al inaugurar el Coloquio Impacto social de la UAM en las periferias urbanas de la CDMX y el Valle de Toluca, iniciativa de la Unidad Lerma en colaboración del INEGI y las otras cuatro Unidades académicas de la UAM, en el marco del 50 aniversario de esta institución, actividad realizada en el auditorio Arquitecto Pedro Ramírez Vázquez de la Rectoría General.
El doctor Gabriel Soto Cortés, rector de la UAM Lerma señaló que hace 50 años el modelo de la UAM contempló la construcción de sus unidades académicas en las periferias urbanas con la finalidad de llevar educación superior de calidad a espacios donde no se tenía acceso con la finalidad de impactar en las comunidades. “La universidad genera movilidad social y el efecto transformador del entorno, promueve el desarrollo de servicios públicos en lugares donde no existían, demanda servicios que detonan la actividad económica, genera conocimiento científico y técnico, brinda servicio social y contribuye a la definición de la política pública”, subrayó.
Adentrándonos en las conferencias, se dictaron las dos primeras, vía remota desde España, el doctor Jordi Suriñach Caralt, especialista en Ciencias económicas y empresariales, catedrático de Economía aplicada y director de Econometría estadística en la Universidad de Barcelona, en su ponencia “Impacto socioeconómico de las universidades, casos de estudio”, aseguró que conocer el impacto monetario que generan las universidades al territorio en el que se ubican, cada vez es más requerido y necesario, por diferentes entidades e instituciones gubernamentales, como académicas. Los impactos se dan en diferente índole, por sectores económicos, territoriales o sociales, sin embargo, el investigador se centró en el impacto económico, contribución al PIB, a la facturación generada por las universidades, a los puestos de trabajo y la recaudación fiscal que retorna al sistema público al explicar las dos grandes estrategias existentes: la demanda y la oferta. Pone hincapié en el tema de la demanda en la cual la Universidad se presenta como un agente económico más en la sociedad. Sumando los impactos indirectos e inducidos obtuvo el total.
La doctora Silvia Ayuso Siart, directora académica de la Cátedra MANGO de Responsabilidad Corporativa en la Escuela Superior de Comercio Internacional de la Universidad Pompeu Fabra, Barcelona, España, detalló el método para obtener el “Cálculo del Valor social Integrado”, aplicado en ocho universidades públicas de Cataluña. Este Cálculo del Valor Social Integrado, consiste contabilizar, por una parte, los efectos de mercado considerando a la Universidad como un agente económico que paga salarios a su personal, que paga impuestos y por tanto genera transacciones económicas que se pueden contabilizar, pero también se contemplan los efectos de “no mercado” que son tangibles o intangibles de mayor relevancia en una institución pública.
Dio importancia a los aspectos de “no mercado” dando una cuantificación aproximada para poder monetizarlos, en conclusión, este enfoque de Valor Social Integrado permitió hacer una valoración sistemática de los beneficios que experimentan todos los grupos de interés afectados por la actividad universitaria, más allá de las relaciones de mercado y observar dónde está el valor importante, generado por la universidad.
En su turno, el doctor Gustavo Pacheco López, coordinador general para el fortalecimiento Académico y Vinculación de la UAM, en su ponencia “Primera aproximación al Valor Social Integrado de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM)- 2023”, presentó datos realizados conjuntamente con las unidades universitarias en apoyo de Alianza FiiDEM, para la cuantificación del Valor Social de la UAM, siguiendo la metodología de la doctora Silvia Ayuso.
La metodología retomó los grupos de beneficiarios o de interés, también conocidos como stakeholders para visibilizar el valor generado más allá del valor económico de mercado.
Este proceso calculó el valor social por la actividad económica, básicamente, el impacto económico directo e indirecto generado por la UAM, así como el retorno a las haciendas públicas. Contempló, también, el valor social específico, que es la dimensión más innovadora y la más compleja de calcular, intentó cuantificar el valor generado para cada grupo de interés beneficiario específico y finalmente la integración de todos en el valor integrado que consideran todas estas dimensiones.
Los principales beneficiarios de la actividad económica de la UAM, según el estudio, son sin lugar a duda el alumnado y sus familias, con 6 mil 146 millones de pesos de un total de 13 mil 85 millones de pesos del Valor Social Integrado. La UAM genera riqueza y bienestar social a su comunidad y sociedad en general a través de sus funciones sustantivas. Quedaron pendientes de cuantificar los valores ambientales y socio-emocionales.
EL INEGI VISUALIZA EL ENTORNO
Pensar en la periferia es apropiarse de los espacios, vivirlos y resignificarlos, abre una serie de oportunidades para los estudiantes, tanto para la población misma, por eso el vínculo que la Universidad mantiene con el INEGI es de suma importancia para la investigación y los proyectos. Entre las herramientas que el INEGI creó para la investigación y dimensionar los alcances en las periferias de la UAM, presentaron el Directorio Nacional de Unidades Económicas (DENUE) que ofrece una visión detallada del panorama económico del país, ofrece datos de ubicación, contacto, actividad económica, nombre comercial, razón social, organización jurídica, personal ocupado y tamaño de los negocios activos en el territorio nacional. Presenta las coordenadas geográficas del establecimiento para ser visualizada en imágenes digitales o satelitales. A los universitarios les sirve para hacer estudios y estrategias de mercado, proporciona datos precisos para estudios económicos, observar los cambios a través del tiempo en cuanto a la información estadística y económica, al igual que geográfica, crecimiento económico, desarrollo urbano, entre otros.
El Mapa Digital de México es una de las herramientas que concentra la información geográfica digital y georreferenciada, conformado por cartografía, imágenes satelitales, fotografía aérea y análisis espacial. Se pueden hacer análisis visuales comparativos de los cambios en el crecimiento del espacio de la Universidad, de campos de cultivo a zonas urbanas, por ejemplo.
El Inventario Nacional de la Vivienda, concentra información sobre los servicios, la infraestructura, principales características de las viviendas, recubrimiento en vialidades, alumbrado público, banquetas, rampas, información por manzana urbana, indicadores de población, vivienda y entorno urbano. Características de localidades rurales. Se puede saber cómo está impactando, la Universidad en la calidad de vida de los habitantes que la rodean.
Para finalizar el programa se pudo apreciar una exposición fotográfica que mostró el proceso de construcción, desde la primera piedra, las edificaciones en los terrenos de las unidades académicas de Iztapalapa, Azcapotzalco y Xochimilco de la UAM, grúas, camiones de volteo, material de construcción y nuevos edificios, hasta las instalaciones actuales, un recorrido de la memoria en la vida universitaria desde aquellas primeras aulas de aquellas periferias de 1974 con imágenes que captaron los rostros de estudiantes, trabajadores y profesores visionarios mirando al futuro.