Durante la segunda mesa del primer Foro UAM-50, “Transformación de la carrera académica en la UAM. Los retos para las nuevas generaciones”, programada por la Rectoría General para conmemorar los 50 años de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) participaron, por la Unidad Iztapalapa, las doctoras Verónica Medina Bañuelos, rectora de la Unidad, y María José Arroyo; por Xochimilco, la doctora Claudia Salazar Villava y el doctor Javier Soria López, rector de la Unidad, todos ellos integrantes de la Comisión de Carrera Académica.
Al inicio, la doctora Salazar Villava mencionó que la carrera académica es mucho más que el sistema de becas y estímulos. Es el instrumento que involucra a la comunidad académica con los objetivos estratégicos de la Universidad, a la vez que modela y define la práctica académica. Sin embargo, sus efectos performativos distorsionaron la actividad académica, aseguró la especialista. Por ello sugirió la transformación de las áreas de investigación en áreas académicas, que funcionen como plataformas para recuperar un trabajo colectivo que desarrolle planeación y evaluación participativas de forma continua, que permita abordar las tres funciones académicas de forma integrada, especialmente entre investigación y docencia.
Propuso la creación de un sistema integral de planeación y evaluación participativa que involucre procesos colectivos y que incluya la evaluación de la gestión y el desempeño de órganos personales. Ampliación radical de la participación en las tareas de dictaminación de becas y estímulos, desarrollada por pares y diferenciada de las comisiones dictaminadoras de concurso de ingreso y promoción; además de una reforma radical del Reglamento de Ingreso, Promoción y Permanencia del Personal Académico (RIPPPA) y el Tabulador de Ingreso, Promoción y Permanencia del Personal Académico (TIPPA), mediante un sistema orientado a estimular procesos participativos y no productos, que contemple a profesores definitivos y temporales y, por último, diseñar un proceso de transición que dé certeza al personal académico.
En su participación, la doctora Verónica Medina Bañuelos comentó la percepción que se tiene al interior de la Comisión de Carrera Académica referente a la organización de las actividades universitarias alrededor del cambio reglamentario que se aprobó hace poco más de un año. El perfil académico en la UAM es complejo —advirtió—, se espera que el profesor haga docencia, investigación y preservación y difusión de la cultura, además de participación universitaria y vinculación. Es un perfil muy completo, pero difícil de lograr, requiere un balance individual o colectivo de las actividades sustantivas y universitarias en conjunto.
Para ello, la rectora sugirió recuperar las áreas académicas, porque son el espacio colectivo donde se integran, promueven y desarrollan las funciones de docencia, investigación y preservación y difusión de la cultura, a partir de las especificidades de la planeación y programación aprobadas por los órganos colegiados y personales. Lo que no difiere del concepto fundacional que ya se trabajaba; es regresar, entender las problemáticas y proponer soluciones.
Por su parte, la doctora María José Arroyo puso énfasis en el gasto presupuestal, ya que nuestra Universidad es autónoma y ejerce recursos públicos, está sujeta al escrutinio público y obligada a cumplir su objetivo con responsabilidad, bajo las directrices institucionales. La carrera académica tiene un marco basado en un modelo de profesores de tiempo completo, lo cual hace a la UAM una Universidad muy cara, aseveró. A su juicio, el modelo actual nos ha llevado a una falta de dirección del trabajo académico debido a la carencia de una planeación que atienda los problemas que emanan de procesos de evaluación sobre resultados institucionales.
Para dar solución a esta situación, la planeación debe ser participativa y establecer planes de trabajo, tanto para mantener las fortalezas como para atender las problemáticas detectadas a la luz de los resultados institucionales. Se debe cambiar radicalmente el sistema de evaluación y vincularlo a la planeación institucional para brindar soluciones a las problemáticas detectadas, preservando la estabilidad financiera. “Sólo así vamos a lograr que se desarrolle la carrera académica basada en la confianza y la responsabilidad social para un mejor desempeño institucional”, concluyó.
Por último, el doctor Javier Soria, rector de la UAM Xochimilco, puso la atención en la parte operativa de las Comisiones Dictaminadoras (CD). Señaló que el desarrollo y gestión de la carrera académica tiene varios componentes en la normatividad UAM, entre los cuales destaca el papel de las Comisiones Dictaminadoras, en especial las del Área (CDA) que ofrecen el espacio institucional para ejecutar los procesos de ingreso, promoción y permanencia del personal académico. En este sentido, deben considerarse tres ámbitos relacionados con el papel de las CD para concretar una reforma integral de la Carrera Académica: integración, funcionamiento y temporalidad de las evaluaciones.
También mencionó que entre los problemas detectados en las CDA está la saturación en el trabajo, por lo que muchas veces no pueden cumplir con los plazos reglamentarios para dictaminar, además de que existe una preferencia en la dictaminación de becas y estímulos, en perjuicio de la dictaminación de ingreso y promoción del personal académico. Entre las alternativas que ofreció destacan la separación de funciones: ingreso y promoción, separados de becas y estímulos, simplificar los procedimientos para otorgar becas y estímulos, incorporar la participación en gestiones académicas, tales como espacios de representación, instancias de apoyo en órganos personales y comisiones académicas, como parte de los elementos a evaluar en los procesos de promoción, estímulos y becas, concluyó.